Con una inigualable vista-mar se encuentra la cornisa, destinada a la práctica de actividades como el stretching, yoga, taichí o step, entre otras.
Un lugar increíble, acompañado de la brisa de los vientos alisios.
Y bordeando la roca volcánica que caracteriza a la zona, en un paisaje de acantilados, disfruta del circuito cerrado de calentamiento y caminata señalizado, alrededor del hotel.